Una de nuestras mayores preocupaciones como padres son nuestros hijos. Quisiéramos proveerles todo lo que necesitan, sin embargo, no siempre es posible. Habrá ocasiones donde te des cuenta que necesitan un amigo, donde no tienen las habilidades necesarias para asumir algunos retos, donde les falta desarrollar algo de su carácter etcétera, y aunque podemos darles herramientas para lograrlo, finalmente el resultado se sale de nuestras manos.
Pero la buena noticia es que sí conocemos a aquel que puede hacerlo. Nuestro padre celestial conoce sus debilidades, sus necesidades aún mejor que nosotros mismos, y por eso podemos confiar en que Él se encargará de darles lo que realmente es bueno para ellos.
Si no sabes cómo orar por ellos, quiero dejarte algunos versículos bíblicos que te pueden servir de guía.
Amado Padre .. Encamina el corazón de (nombre de tu hijo), dale a mi hijo/a, un corazón perfecto , para que guarde tus mandamientos y tus estatutos . 1 Crónicas 29:19
Te pido “que el Espíritu tuyo este sobre mí y tus palabras que pusiste en mi boca no falten de mi boca, ni de la boca de mis hijos, ni de los hijos de sus hijos, desde ahora y para siempre “Isaías 59:21
“Y nuestra descendencia será conocida entre las Naciones, y nuestros renuevos en medio de los pueblos, todos los que los vieren reconocerán que son linaje bendito de Jehová” Isaías 61:9
“ Jehová llamó desde el vientre a (nombre de tu hijo) desde las entrañas de su madre, tuvo su nombre en memoria y puso su boca como espada aguda, la cubrió con la sombra de su mano y la puso por Saeta bruñida , la guardó en su aljaba y le dijo: Mi siervo ere, oh (nombre de tu hijo) porque en ti me gloriaré” Isaías 49: 1-3
“ Y le daré corazón a ( nombre de tu hijo) para que conozca que yo soy Jehová, y me será por pueblo y yole seré por Dios, porque se volverá a mi de todo su corazón” Jeremías 24:7
Estos son algunos ejemplos de como puedes hacerlo. Te dejo otros versículos que puedes buscarlos y utilizarlos de la misma manera.
Salmo 89:20-22, 2 Timoteo 3:15, Jeremías 1:15
Te animo a que todos los días saques un tiempo e intercedas por tus hijos, preséntalos delante de Dios, y descansa en El , que El hará.
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